Los países del norte y centro de Europa están mejor posicionados para responder al reto de la neutralidad de carbono para el año 2050. China y los Estados Unidos, con India muy cerca, lideran la lista de los países que emiten más CO2.
¿Y si le decimos que el país ideal para vivir es Dinamarca? No crea que es solo por haber sido votado como el segundo país más feliz del mundo por la ONU y por poner la palabra hygge en boca de todos, un concepto que se dice, explica el secreto de su felicidad y que se encuentra entre el bienestar y una situación cómoda y libre. Dinamarca también es un gran país para vivir, ya que ocupa el primer lugar en el Environmental Performance Index (Índice de Desempeño Ambiental).
Este índice, desarrollado y presentado por las universidades norteamericanas de Yale y Columbia, es el resultado de un diagnóstico ambiental realizado a 180 países, a través de 11 categorías y 32 indicadores. Evalúa no solo las emisiones de gases de efecto invernadero, sino una amplia gama de indicadores que van desde el tratamiento de residuos hasta la biodiversidad.
La hegemonía europea
José Campos Costa, responsable del área de Comunidades Energéticamente Positivas de EDP New, dice que "nuestro país aparece en el puesto 27, en gran parte por la pesca, la agricultura y los servicios de los ecosistemas". Una puntuación media en comparación con sus homólogos europeos, lo que deja claro que todavía queda mucho por hacer en territorio nacional en el camino hacia la neutralidad de carbono (enlace al artículo Descarbonización en Portugal).
Siguiendo con la clasificación de los países menos contaminantes, encontramos a Luxemburgo en el 2º puesto y a Suiza en el 3º, con la curiosidad de que todos los puestos hasta el 11º están ocupados por países europeos, como el Reino Unido, Francia, Austria, Finlandia y Suecia. En el puesto 12 se sitúa Japón, uno de los pocos países del continente asiático con una buena reputación medioambiental, con China sólo en el puesto 120. "Es un país, como sabemos, muy afectado por la contaminación atmosférica derivada de la industria pesada y del transporte. Aunque el mercado de vehículos eléctricos está creciendo mucho y será determinante para lograr la neutralidad de carbono a la que se ha comprometido", explica José Campos Costa.
¿Se puede hablar de países inteligentes?
Si bien existe este índice que indica los países que son más o menos inteligentes, no se puede decir que ningún país esté realmente cerca de lograr la descarbonización. Aquí tenemos que mirar a lo particular y no a lo general. Sí, se puede hablar de ciudades y comunidades inteligentes (enlace al artículo ciudades inteligentes), de las cuales el POCITYF portugués es uno de los abanderados nacionales, con la implementación de EDP NEW. Forma parte de los proyectos H2020, un fondo comunitario que financió 18 iniciativas desde 2015 a 2020, en las que también destacan Holanda y Finlandia, con seis y cuatro ciudades faro de la energía positiva, respectivamente.
Según José Campos Costa, estos proyectos pueden conducir a resultados muy interesantes, pero desde el punto de vista de la descarbonización total de un país, todavía no son muy relevantes. Sin olvidar, el importante papel de la centralización y la acción subsidiaria de los gobiernos u organizaciones, para que respondan a los desafíos que se imponen localmente, especialmente en materia de tecnología. "El impacto más importante de estas ciudades inteligentes es toda la innovación que se lleva a estas regiones, como el aumento de las energías renovables, la adopción de vehículos eléctricos, la reducción del consumo eléctrico a través de la eficiencia energética y el aumento de la capacidad de las baterías de estas ciudades faro. Estas serán las zonas de demostración, que luego harán que la innovación se difunda y, entonces sí, ya podemos empezar a hablar de una descarbonización más global".
¿Qué países contaminan más?
Los procesos de descarbonización no son fáciles y muchos países aún tienen un largo camino por recorrer. Según los datos de Global Carbon Atlas, una plataforma científica que proporciona una descripción general de las emisiones de dióxido de carbono en todo el mundo, no es difícil llegar a los 3 principales países que emiten más CO2 a la atmósfera. China, por su tamaño y población, lidera el ranking de los más contaminantes, con 10.175 Mt CO2 (tonelada métrica de dióxido de carbono, medida estándar para cuantificar las emisiones de CO2), seguida por Estados Unidos, con 5.285 Mt CO2 - y que lidera en emisiones per cápita, y por India, con 2.616 Mt CO2.
No será una gran sorpresa ver a estos países a la cabeza. Después de todo, todavía dependen en gran medida de los combustibles fósiles por una razón u otra. China, para mantener los precios de la energía asequibles y competitivos; Estados Unidos para escapar de la dependencia de otros mercados internacionales y debido a la política energética seguida por Donald Trump hasta 2020, y con Joe Biden, los compromisos ambientales volvieron a la agenda política; e India, como país emergente, para ampliar el acceso a la energía.
Se espera que China, que ya se ha comprometido a lograr la neutralidad de carbono en 2060, y Estados Unidos sigan el ejemplo de Europa en general, que ha demostrado una voluntad férrea para cumplir su parte del Acuerdo de París. "Dado que China es un actor tan grande e importante en Asia, es probable que si comienza a dar el ejemplo en la descarbonización, probablemente haga que sus contrapartes asiáticas hagan lo mismo, como Japón y Corea del Sur. Además de tener un papel importante en un mercado de energías renovables más competitivo, con mejores precios en la tecnología solar y el almacenamiento", concluye José Campos Costa.
¿Qué es el diagnóstico medioambiental para Portugal?
Portugal no obtiene más que un "Suficiente" (Aprobado) en esta misma evaluación, que hace un diagnóstico medioambiental de 180 países. José Campos Costa, responsable del área de Comunidades Positivas Energéticas de EDP New, afirma que "todavía queda mucho por hacer en Portugal, pero tampoco debemos olvidar que en cuanto a la integración de las energías renovables (enlace al artículo sobre renovables) estamos haciendo un buen trabajo, continuo, incluso somos pioneros con el proyecto WindFloat, de EDP, a nivel de eólica marina". En resumen: en términos de energía, Portugal tiene uno de los programas más ambiciosos del mundo, con miras a la neutralidad de carbono; pero aún queda mucho por hacer en términos medioambientales.
José Campos Costa destaca que Portugal tiene una mala puntuación en términos de movilidad, que debería representar alrededor del 25 % de las emisiones de gases de efecto invernadero, y en el sector de los edificios. "Debe haber más electrificación de la movilidad, más movilidad compartida y también intermodal. Además, los edificios, responsables del 35 % de las emisiones de CO2, están aún peor clasificados en el ámbito de la eficiencia energética", explica José Campos Costa. Recuerda que "dos tercios de nuestro parque de viviendas se construyeron en la década de 1990, precisamente la década en la que se comenzaron a introducir los requisitos más ambiciosos en cuanto a su rendimiento energético".
De cualquier manera, Portugal, en general, y EDP, en particular, han hecho un camino ejemplar. "EDP ya se ha comprometido a cerrar todas sus centrales eléctricas de carbón, que son las que generan más emisiones por unidad de energía producida. Ya lo hicimos en Sines, donde estaba ubicada la mayor planta de carbón del grupo, lo estamos haciendo en España y lo vamos a hacer en Brasil, hasta 2025. Por tanto, sólo quedarán unas pocas plantas de gas natural en Portugal y España, que operarán en régimen de respaldo. En 2030, toda la producción de EDP procederá de fuentes renovables y ese año seremos neutros en carbono, este es el compromiso público asumido por EDP", afirma Pedro Paes.
En línea con la estrategia de la Unión Europea y con un objetivo muy ambicioso de reducción de gases de efecto invernadero (enlace al artículo sobre neutralidad de carbono), Portugal "ha sido un ejemplo para estos países más contaminantes", atestigua Pedro Paes.