La primera fase de la privatización de EDP tuvo lugar en junio de 1997, con la venta de 179.960.000 acciones que representaban el 29,99 % del capital de EDP (que consiste en 600 millardos de acciones con un valor nominal de 1.000 escudos) y fue aprobada por el Decreto de Ley nº 78-A/97, de 7 de abril.
La operación consistió en una oferta combinada de acciones a través: (i) de una Oferta Pública de Venta (OPV) en el mercado nacional, dirigida a pequeños suscriptores, público en general, obligacionistas y trabajadores de EDP; (ii) de una venta directa dirigida a Inversores Institucionales que estaban obligados a distribuir posteriormente las acciones, especialmente en mercados internacionales.
Los términos de esta primera fase de privatización fueron definidos por las [Resoluciones del Consejo de Ministros nºs 68/97, 82/97 y 95/97.
De las 179.960.000 acciones vendidas, 2.388.000 se retuvieron como premio de lealtad (1 acción por cada 25 acciones suscritas y retenidas durante más de un año por pequeños accionistas suscriptores, emigrantes y trabajadores de EDP), siendo atribuidas efectivamente 1.307.261 acciones el 16 de junio de 1998.