No existe el Planeta B.
Si queremos reducir el cambio climático y revertir los efectos que ya se están sintiendo en los océanos, bosques o ciudades, debemos seguir centrándonos en la transición energética. Este es uno de los pasos más importantes para mejorar también la calidad del aire que respiramos y reducir la incidencia de enfermedades y muertes asociadas con la contaminación del aire.
EDP trabaja desde hace varios años para lograr una transición energética rápida, segura y accesible para todos. Por eso vamos a eliminar el uso de carbón en nuestras plantas ya en 2025 y lograr una producción eléctrica 100 % renovable en 2030. El camino no es fácil, por eso invertimos en innovación tanto en nuestras operaciones como en nuevos servicios que permitan a las personas mejorar la sostenibilidad de sus vidas y del planeta.
Movilidad eléctrica para reducir emisiones
Es en el tráfico de las ciudades y carreteras principales donde el efecto de la contaminación del aire es más notorio. Incluso las avenidas con gran cantidad de árboles, lugares agradables para caminar, se ven afectadas por el enemigo invisible que son los contaminantes, ya sean suspendidos en el aire o depositados en el suelo y las plantas. El compromiso con la movilidad fluida (a pie, en bicicleta, en scooter) reduce drásticamente tanto el número de automóviles en las calles como los niveles de contaminación urbana.
Sin embargo, los coches y otros vehículos de transporte de personas y mercancías son esenciales para el movimiento de personas y mercancías. En este sentido, la transición a la movilidad eléctrica ayuda a mejorar la calidad del aire, especialmente en zonas densamente pobladas o industrializadas. Fue en 2014 que EDP lanzó el primer servicio de movilidad eléctrica dirigido a clientes residenciales en Portugal, reforzando constantemente la oferta. En 2020, EDP Comercial se convirtió en el socio energético exclusivo de la Asociación de Usuarios de Vehículos Eléctricos. España y Brasil son otros países donde el fomento de la movilidad eléctrica es la apuesta del grupo.
EDP también fue la primera empresa portuguesa, en 2019, en unirse a la iniciativa EV 100 de The Climate Group, un grupo de más de 100 grandes empresas globales que se comprometen a tener una flota de vehículos totalmente eléctricos para 2030, además de proporcionar estaciones de carga para empleados. En total, estas multinacionales representan más de 5 millones de vehículos de 80 países.
Más EDP renovable, menos contaminación
Cuando la electricidad producida provenga exclusivamente de fuentes renovables, sabremos que la sostenibilidad del planeta está más cerca de lograrse. Es en el sol y el viento, fuentes intermitentes pero inagotables, junto con el agua, donde reside la esperanza de una energía 100 % limpia.
EDP ha ido reduciendo cada vez más el uso de carbón - hasta 2025, las plantas de EDP serán libres de carbón y gas natural, e invirtiendo en renovables, para tener una cartera eficiente y diversificada que mejore el rendimiento y cree valor en el economía y sociedad. Proyectos de innovación como los paneles solares flotantes, Open Data o el PV Tech Lab están desarrollando cada vez más la generación solar fotovoltaica a gran escala, mientras que Bairro Solar allana el camino para la creación de pequeñas comunidades para producir y compartir electricidad, mejorando la eficiencia y la sostenibilidad en las zonas urbanas.
En el sector eólico, Windfloat, en Viana do Castelo, es ya un hito en la producción de electricidad en alta mar, con los mayores aerogeneradores del mundo en formato flotante, y ha sido sede de varios proyectos innovadores. Como Pivot Buoy, para la creación de plataformas versátiles para aguas profundas; Atlantis, para la aplicación de la robótica en la inspección y el mantenimiento de las estructuras de la energía eólica marina; o Durable, que busca mejorar la competitividad, tanto en la energía solar como en la eólica, a través de la cooperación técnica internacional, siendo la costa atlántica el centro de conexión de los distintos socios de EDP.
Energía de las olas para ayudar a la sostenibilidad en la tierra
Los océanos todavía tienen mucho que ofrecer en el campo de la energía, un inmenso potencial que puede ayudar a multiplicar las soluciones, con el fin último de reducir el uso de combustibles fósiles y la contaminación atmosférica. Sea Titan, que reúne a NEW con varias entidades internacionales, es uno de los proyectos más recientes de EDP, destinado a desarrollar tecnología para aumentar la capacidad de producir electricidad a través de las olas con un coste menor. Antes de eso, NEW y Labelec participaron en DTOceanPlus, una iniciativa de siete países comprometidos con la creación de herramientas de diseño que, adaptadas a diferentes necesidades, faciliten la creación de sistemas de generación a partir de energía oceánica.
Flexibilidad para combatir las emisiones
La descarbonización y la mejora de la calidad del aire se consiguen mediante la inversión en renovables, pero también mediante una mayor eficiencia en la producción convencional, mediante la flexibilidad y complementariedad de las fuentes de energía, y mediante la mejora del consumo a nivel de edificios. Con FLEXnCONFU, por ejemplo, EDP está probando la incorporación de hidrógeno en centrales de ciclo combinado, para reducir el consumo de gas natural y sus propias emisiones, mientras estudia la producción y almacenamiento de hidrógeno asociado a la misma central.
SATO apuesta por la eficiencia energética en los edificios, buscando crear una solución tecnológica integrada e inteligente basada en la nube que permita a un edificio auto evaluarse, para reducir tanto el consumo como las emisiones poluentes.
Sparcs, un proyecto internacional financiado por H2020, también busca desarrollar la eficiencia energética a mayor escala de un vecindario o ciudad. Maia se une a otras seis ciudades europeas en la búsqueda de soluciones urbanas que faciliten la creación de Positive Energy Blocks, pequeñas áreas geográficas en las que la producción renovable existente supera su consumo. Esto se logra integrando los diversos componentes del uso de electricidad residencial, exterior o comercial, con el fin de maximizar la eficiencia y evitar las emisiones de carbono.
Más de 25 años de política medioambiental
1994, EDP lanzó su primera política medioambiental, demostrando la preocupación del grupo por el bienestar social y el respeto por la naturaleza en sus diversas actividades, buscando, desde el principio, minimizar estos impactos. Más de 25 años después, en febrero de 2021, se firmó un nuevo documento para reafirmar este mismo compromiso con el planeta.
Además de nueve compromisos básicos para asegurar "la implementación y mantenimiento de sistemas de gestión ambiental adecuados y efectivos, con el fin último del Desarrollo Sostenible", EDP se compromete a realizar acciones concretas "con el fin de proteger el medio ambiente y poner en valor el capital natural". Cambio Climático, Economía Circular y Biodiversidad son los tres ejes principales de esta acción más directa, donde la mejora de la calidad del aire es uno de los principales objetivos.
En defensa del bosque
Los árboles y otra vegetación son los principales responsables de capturar el dióxido de carbono y, en consecuencia, renovar el aire. En los últimos años, EDP ha invertido cada vez más en la protección de los bosques, particularmente en áreas asociadas con la producción y distribución de electricidad. En Brasil, el uso de drones para la instalación y mantenimiento de nuevas líneas reduce drásticamente la cantidad de árboles cortados a lo largo de esta ruta. En Portugal, con redes más maduras, la inversión de E-REDES ha ido aumentando en programas de apoyo a la reforestación - tras incendios - pero también en acciones de inspección e intervención en las franjas verdes próximas a las líneas eléctricas. En 2020, esta inversión ascendió a 16 millones de euros, un 26 % más que el año anterior.
Combatir la contaminación atmosférica es algo que hacemos todos los días, con una producción de energía cada vez más renovable, una inversión constante en innovación, y una apuesta por la movilidad eléctrica y la eficiencia de todas nuestras instalaciones. Pero también lo promovemos con nuestros clientes, con soluciones innovadoras que nos permitan reducir y cambiar los patrones de consumo. Todos juntos, sigamos luchando por una menor contaminación, por la calidad del aire, por la sostenibilidad del planeta.
Es Ahora o Nunca
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