La movilidad urbana es uno de los factores más relevantes cuando se habla de sostenibilidad. Conozca las tendencias de las ciudades inteligentes.
A principios del siglo XX, el hombre recurría a la tracción animal para desplazarse. Entre la invención del coche y los viajes espaciales han pasado apenas 100 años. Las Naciones Unidas calculan que alrededor del 70% de la población mundial estará viviendo en ciudades para el 2050. En un mundo que afronta enormes desafíos relacionados con el cambio climático causados por el calentamiento global, y mientras los viajes en el tiempo no nos permitan volver atrás en el tiempo y corregir los errores, es urgente que nos replanteemos la forma en que nos movemos.
La forma en la que normalmente nos desplazamos en las ciudades (un vehículo, un pasajero) es una de las grandes causas de las emisiones de dióxido de carbono (CO2). Los datos divulgados por la Agencia Europea del Medio Ambiente muestran que, solo en Europa, el transporte es responsable del 30% de las emisiones de CO2. De ellas, el 72% proviene del transporte por carretera. A esto hay que añadir el aumento de los atascos y la consiguiente polución. El futuro de la movilidad pasa, inevitablemente, por medios de transporte e infraestructuras sostenibles más ecológicos, limpios y accesibles.
5 tendencias de movilidad sostenible de las ciudades inteligentes
1. Micromovilidad
Esta tendencia de movilidad urbana es sostenible a escala medioambiental, económica y social. Los vehículos como los patinetes o las bicicletas, al moverse mediante la energía generada por los usuarios o por energía eléctrica, no desprenden gases de efecto invernadero.
Cooltra nació en Barcelona en 2006 con el propósito de transformar las ciudades en lugares más sostenibles, seguros y eficientes. El líder europeo en movilidad sostenible a dos ruedas está presente en más de 50 ciudades, distribuidas por 8 países, y cuenta con 18.000 vehículos entre motos y bicis. El 75% son eléctricos.
La industria del automóvil también se ha adaptado e invertido en plataformas de micro movilidad. Seat, por ejemplo, lanzó la marca MO, que ya ha comercializado tres modelos de patinetes eléctricos. En palabras del director de marca, una de las razones de esta apuesta surgió del hecho de que, en algunos países, el porcentaje de personas que sacan el carné de conducir ha descendido casi en un 50%.
Por lo tanto, se supone que, si los más jóvenes no sacan el carné de conducir, tampoco van a comprar un coche. Viendo el incremento del uso de patinetes, motos eléctricas y otros servicios de movilidad, Seat decidió que necesitaban hacer una apuesta. En el mercado hay otras marcas haciendo la misma apuesta, como pueden ser Renault, con Mobilize, o Toyota, con Kinto.
Las plataformas de movilidad, como Uber y Bolt, o las bicis y los patinetes compartidos, podrían generar un volumen de negocio cercano a los 600 billones de euros en 2030. Esto es más del doble que los 260 billones de euros generados en 2020. Esta conclusión se desprende de un reciente estudio desarrollado por Oliver Wyman Forum y el Instituto de Transporte de la Universidad de California, en Berkeley, dado a conocer por Bloomberg.
2. Movilidad como Servicio (Mobility as a Service - MaaS)
Este modelo está centrado en el usuario y convierte a la movilidad urbana en un sistema, eficiente y accesible, permitiendo que los pasajeros planifiquen, paguen y reserven viajes, todo desde una app. El MaaS se ha perfilado como una importante tendencia en movilidad urbana, ya que se aleja del modelo del vehículo privado para convertirse en uno de transporte compartido. Esto hace posible que se combinen el coste y la reducción de la huella de carbono del transporte público con la respuesta a las necesidades individuales de cada usuario.
Por todo ello, el MaaS tiene garantizado su puesto en el futuro de la movilidad urbana y de la sostenibilidad. Volkswagen, por ejemplo, ha integrado el MaaS en su estrategia NEW AUTO de transporte urbano autónomo, y planea que el software esté funcionando para 2030.
3. Vehículos autónomos
No son otra cosa que dispositivos de transporte que utilizan sensores GPS, entre otros, para navegar y garantizar la seguridad de los otros vehículos y de los peatones. Tienen el potencial de contribuir a la reducción de los atascos, lo que significa menos polución. Y, como generalmente son eléctricos, también contribuyen a reducir las emisiones de dióxido de carbono.
4. El futuro es eléctrico
“El futuro es eléctrico”. Quien asegura esto es el presidente Fastned’s, una startup holandesa que gestiona una red de estaciones de recarga para vehículos eléctricos distribuida por toda Europa, basada en las energías solar y eólica.
Michel Phelan, CEO de Grid Beyond, una compañía irlandesa que lleva más de una década operando en el mercado de las redes inteligentes, afirma que, utilizando la Inteligencia Artificial (IA), pueden desarrollarse soluciones capaces de predecir cuándo necesitan cargarse estos vehículos, qué puntos de carga están disponibles y en qué momento está más cara la energía. Recogiendo toda esa información, es posible optimizar el consumo y minimizar los costes de carga de los vehículos. Este tipo de solución puede resultar especialmente interesante para las empresas con flotas de camiones, por ejemplo.
5. Nuevas infraestructuras
La adopción de vehículos de micromovilidad, transporte urbano eléctrico y demás formas de movilidad sostenible, requiere que las ciudades implementen nuevas infraestructuras. La micromovilidad y el transporte urbano eléctrico, por ejemplo, implican la creación de nuevos carriles de circulación, plazas de aparcamiento y estaciones de recarga.
La movilidad urbana y las ciudades inteligentes
Según el profesor Lee Jung Hoon, coordinador general del proyecto de desarrollo del Índice de Ciudades Inteligentes, la pandemia de la Covid-19 trajo consigo importantes cambios en la vida diaria de la humanidad. Propició el rápido desarrollo de una gran cantidad de tecnologías de la innovación, como es el caso de la Inteligencia Artificial (IA).
China es pionera en la adopción de soluciones tecnológicas. Hangzhou, se apoya en City Brain, un gigantesco sistema tecnológico de Ali Baba que administra 128 intersecciones en las que los semáforos reciben información de los vehículos mediante sensores y ajustan la frecuencia de las luces para asegurar una cadencia ideal para el tráfico. El sistema también cambia rápidamente las luces de rojo a verde siempre que hay una ambulancia atendiendo una emergencia. Algo que también ha sido posible es la detección de accidentes en tiempo real, lo que permite a la policía llegar al lugar de los hechos en menos de cinco minutos. Con el hecho de monitorizar los vehículos de la ciudad, los atascos se han reducido un 15%.
Shanghai utiliza City Brain para optimizar las rutas de los autobuses. Los usuarios pueden indicar, a través de AliPay, sus lugares de salida y llegada. A continuación, reciben información sobre las paradas de bus más próximas y qué autobuses son los más adecuados (los billetes se sacan digitalmente). Mientras tanto, con la mirada puesta en el cielo, empresas como EmbraerX, Boeing o Bell, entre otras, ya están desarrollando prototipos de coches voladores.
Seúl, la capital de Corea del Sur, ocupa un lugar especial en la lista de las ciudades más innovadoras en lo que se refiere a soluciones de movilidad urbana. Según la webSmart Planet, una de estas estrategias innovadoras es Baes on data, que consiste en la recogida y análisis de los patrones urbanos para definir las infraestructuras y servicios adecuados.
La monitorización urbana en tiempo real es una de las formas más efectivas de obtener esos datos. Los sensores instalados (más de 50.000) incluyen cámaras de vigilancia y seguridad (CCTV) y detectores que miden la fluidez del tráfico, la velocidad de la circulación y la calidad del aire. Los Datos Abiertos de Seúl proporcionan acceso a más de 5.000 bases de datos, entre las que se encuentra la información recogida a través de dichos sensores.
En 2020 se analizaron tres billones de llamadas de teléfono previamente grabadas para identificar las llamadas realizadas durante la noche a las compañías de taxi con el objetivo de planificar las rutas y la frecuencia de los autobuses Búho, que dan servicio a la gente que sale por la noche y a los que trabajan de noche.
La plataforma de Big Data también se utilizó para crear un detective de Inteligencia Artificial que permite identificar posibles patrones de crímenes cuando se registran incidentes, reduciendo considerablemente el tiempo de respuesta.
Asimismo, es importante señalar que la ciudad tiene un sistema de autobús y de metro (con 287 kilómetros de extensión y 293 paradas), reconocido por las Naciones Unidas (ONU) como referencia en términos de puntualidad. Actualmente, casi el 70% de los viajes realizados por los residentes de Seúl se realizan en bus y metro.
En Barcelona, más de 350.000 vehículos utilizan diariamente las 21 calles del Ensanche, cuya intención es reducir el tráfico un 40% y con ello, la concentración de Óxido Nitroso (NO2) y de partículas en suspensión (derivadas del uso de combustibles fósiles). Para el primer trimestre de 2023, las vías que concentren los niveles más altos de contaminación, albergarán plazas públicas con árboles, comercios, carriles bici, jardines, parques infantiles, terrazas y arte público. El objetivo, a largo plazo, será ordenar el tráfico en 500 calles del distrito.
En Lublin, Polonia, se diseñó e implantó un sistema innovador que incluía la modernización de las infraestructuras del transporte urbano y la flota de autobuses de la ciudad. El proyecto consistió en la instalación de equipos GSM y GPRS en los vehículos: pantallas electrónicas en las paradas de autobús y la creación de una web que ofrece información actualizada a los pasajeros. Gracias a su innovación en las soluciones para la gestión del transporte público, Lublin fue elegida en 2015 Ciudad Inteligente del Año, de entre las ciudades con una población de entre 100.000 y 350.000 habitantes.
En julio de 2020, París anunció la creación de "distritos de 15 minutos", en los que todos los servicios necesarios para los ciudadanos están a 15 minutos de distancia, ya sea a pie o en bicicleta. El "Programa de Innovación de la Movilidad", en el que se integra este proyecto, pretende mejorar la calidad del aire y el día a día de los parisinos. En el año 2024 no se permitirá la circulación de vehículos diésel en París y está previsto prohibir los vehículos de gas para 2030. La empresa de transportes de París ha puesto en marcha el servicio 100% eléctrico "Autobús Lanzadera de Conducción Autónoma con Inteligencia Artificial (IA)", que se está ampliando, y las principales vías de comunicación se están centrando en la micromovilidad.
Reconocido en todo el mundo como modelo de movilidad urbana, el sistema de transporte de Hong Kong ha alcanzado en las últimas décadas todo su potencial al equilibrar la sostenibilidad medioambiental con la económica y social. La red de metro y tren, Mass Transit Railway, es la columna vertebral del modelo de transporte. Cubre todos los enlaces clave de la región y proporciona 5,6 millones de viajes diarios.
Londres es la ciudad pionera de la movilidad urbana: implantó el primer túnel submarino, el primer aeropuerto internacional y la primera red de metro: el London Underground, conocido como The Tube. Hoy en día, el sistema de transporte de la ciudad es una referencia mundial porque incluye el metro (la red tiene más de 400 kilómetros de extensión y transporta alrededor de 1.100 millones de pasajeros al año), el tren, el autobús, la bicicleta y los taxis. En 2010, Londres puso en marcha su sistema de alquiler de bicicletas públicas, que ahora cuenta con más de 6.000 bicicletas. Otra iniciativa adoptada por la ciudad fue la restricción del tráfico de vehículos en el centro, en pro de la promoción del uso del transporte público y la consiguiente reducción de las emisiones de carbono.
En Viseu, el proyecto MUV (Movilidad Urbana de Viseu), se ha materializado, entre otros, en Viriato, el primer transporte público eléctrico no tripulado de Portugal. Cuenta con una aplicación para sacar billetes, horarios e información en tiempo real. También incluye el Tele BUS, un servicio de transporte a demanda, y MUV Park, que permite gestionar el aparcamiento en superficie.