En Portugal, la lucha contra la pobreza energética una casa a la vez
El proyecto de inclusión energética es un proyecto desarrollado por SICO que tiene como objetivo reducir la pobreza energética en Portugal. El proyecto se basa en ofrecer soluciones habitacionales eficientes y de ahorro energético a familias de escasos recursos. Las soluciones pueden ser pasivas (aislamiento térmico, ventanas, puertas), equipos más eficientes, iluminación LED, etc.
Para materializar la oferta de productos, el proyecto trabajará en alianza con las IPSS que se encuentran en terreno, y que serán los gestores del proyecto junto con sus beneficiarios. Estos señalarán a las familias, postularán para ellas en la plataforma de aplicaciones – desarrollada especialmente para el proyecto, e incluso serán quienes se encargarán de implementar las soluciones a ofrecer (búsqueda, negociación y adjudicación de proveedores, pagos a proveedores, gestión de la ejecución, etc.). El IPSS comunica los gastos que tiene con la contratación de soluciones y EDP financiará estos gastos por el orden del 115%.
Con el fin de adaptar la intervención a las necesidades de cada vivienda y hogar, EDPC realizará previamente un diagnóstico energético, con el fin de poder identificar qué soluciones se deben implementar en cada vivienda. El diagnóstico de EDPC consistirá en una revisión del circuito eléctrico de las viviendas (para comprobar que la instalación eléctrica está en buen estado) y una certificación energética (para identificar las principales soluciones de eficiencia energética a tener en cuenta). Además, se pondrá a disposición un cuestionario en línea para evaluar las rutinas de consumo de energía de los hogares, así como un análisis de los equipos eléctricos que poseen, para comprender también qué soluciones de ahorro considerar.
Toda interacción con EDPC y el beneficiario será mediada por el socio IPSS. El IPSS también llenará el cuestionario en línea, con la información proporcionada por el beneficiario. EDP contó con el apoyo de CENSE – laboratorio de la facultad de ciencia y tecnología, para el desarrollo del cuestionario en línea y para la construcción de una lista predefinida de soluciones a proponer en cada situación. El proyecto tendrá un piloto en Portugal, se desarrollará entre el 22 de noviembre y el 23 de julio y está destinado a apoyar entre 30 y 50 familias. Hay tres posibles presupuestos a asignar a cada familia: 3.000 para inquilinos con contratos de arrendamiento de entre 3 y 7 años, 7.000 para inquilinos con contratos de arrendamiento de más de 7 años, 10.000 € para propietarios. El piloto comenzará con 8 IPSS asociados.
La identificación, formación y seguimiento de los IPSS se adjudicó a Entrajuda, una entidad muy presente en el ecosistema social de Portugal y que a menudo asume estos roles de gestión/seguimiento de proyectos. El piloto tendrá una fuerte medición de impacto, para entender bien qué impacto tendrá el proyecto, dato importante para decidir una eventual replicación para otras geografías. La medición del impacto será realizada por un socio, el laboratorio Smart Energy, que garantizará todos los pasos necesarios para medir, procesar y analizar los datos. Además de la medición de impacto, está previsto realizar visitas de campo por parte del equipo del proyecto (post-intervención) para recopilar comentarios de los beneficiarios y monitorear la instalación real de las soluciones financiadas.