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Avifauna:

• El primer protocolo EDP relacionado con aves se estableció en 2003, centrándose en líneas eléctricas de media y alta tensión. Ese mismo año se elaboró un manual de buenas prácticas para la construcción de nuevas líneas y se lanzó un plan de corrección de 647 km de líneas, para minimizar la electrocución y el impacto de aves.
• En 2002, se vio por última vez el último águila pescadora en Portugal. Nueve años después, EDP se unió a CIBIO en un proyecto para reintroducir la especie, con varios especímenes siendo transportados por avión desde Suecia y Finlandia al área de la presa de Alqueva. Desde 2015, cada año, nacen polluelos y varias aves regresan a Portugal después de migrar al norte de África, lo que demuestra que el águila pescadora definitivamente está de regreso en tierras portuguesas.
• En Francia, EDP Renováveis apostó por elevar 15 metros los aerogeneradores del proyecto offshore Dieppe-Le Tréport, garantizando un pasillo libre para las aves que vuelan bajo las palas.
• En Estados Unidos, EDP Renováveis ha apoyado varios proyectos de seguimiento del águila real y del águila calva, en los estados vecinos de Oregón y Washington. Estos estudios han demostrado que la población de estas especies no está disminuyendo.
• En España, otra iniciativa de EDP Renováveis se centró en el águila perdicera. El seguimiento de una pareja de la especie cerca de un parque eólico concluyó que su territorio era más pequeño en comparación con otras parejas de águilas. Se hicieron mejoras en la vegetación local para potenciar las áreas de alimentación y, unos años después, ya se comprobó la reproducción. En un proyecto paralelo, también en España, se redujo la velocidad las palas eólicas a última hora de la tarde para evitar los choques y la mortalidad tanto de las aves que vuelven a sus nidos como de los murciélagos que salen a alimentarse.

Peces y animales acuáticos:

• Asociada a la presa de Baixo Sabor, EDP creó un vivero de peces en el arroyo Vilariça, en el municipio de Torre de Moncorvo. El desove protegido de varias especies locales, como la boga y el barbo, no solo garantiza su sostenibilidad en el área de la presa, sino que también permite a las comunidades locales continuar pescándolas y ponerlas a disposición en los restaurantes.
• En la cartera de presas de EDP en Portugal, las plantas más pequeñas tienen rampas para peces, que facilitan la circulación entre los dos lados del 'muro'. Las grandes centrales hidroeléctricas del Duero tienen instaladas las denominadas esclusas de Borland, con la misma finalidad. Y en Minho, en la presa de Touvedo, hay elevadores de peces.
• En Brasil, con la construcción de la presa Peixe Angical, en el río Tocantins, el nuevo embalse cambió la geografía de la región. Para eliminar el impacto en la fauna del río, EDP lanzó un proyecto para mapear, monitorizar y reubicar los nidos de tortugas, para protegerlos tanto de los depredadores como de las inundaciones. Los peces de río, las marsopas y los guacamayos jacintos también se convirtieron en objeto de análisis y conservación. También se lanzaron varias iniciativas de concienciación ambiental en la región.

Bosques:

• El lobo ibérico es el mayor depredador de Portugal y ya ha dominado casi todo el territorio. Actualmente se limita al 20 % del país y alrededor de 300 lobos, con dos poblaciones distintas separadas por el río Duero. En 2006 EDP Renováveis se unió a otras empresas eólicas que operan en los territorios del lobo, en la financiación de la Asociación para la Conservación del Hábitat del Lobo Ibérico, que también pasó a intervenir directamente en las fases de diseño y construcción de parques. Para que sigan aullando los lobos en Portugal.
• En Asturias, España, se resiste una de las últimas poblaciones ibéricas de osos pardos europeos, a pesar de que uno de ellos ha sido detectado en Portugal, en 2019. EDP tiene presencia en la región desde hace varias décadas y la Fundación EDP en España colabora con la Fundación Urso das Asturias -que se dedica a la conservación de la especie desde 1992. También apoya a la Fundación Migres, que se dedica a la investigación de aves migratorias.
• En Brasil, para minimizar la deforestación de los bosques en la construcción de nuevas líneas de distribución, EDP comenzó, en 2018, a utilizar drones para extender los cables conductores de electricidad. Se consiguió una reducción del 85 % de la vegetación a cortar y una reducción del 30 % del tiempo necesario para la construcción. También se empezaron a utilizar drones para el seguimiento periódico de las líneas y de los propios ecosistemas.
• Desde 2014 EDP desarrolló, en Portugal, un Plan de Reducción del Riesgo de Incendios, para ser implementado en 2.000 hectáreas de hábitats prioritarios, que tuvo una reducción del 80 % en el número de ocurrencias. Pero, dado que los grandes incendios continúan siendo una dura realidad en Portugal, EDP promueve regularmente iniciativas de voluntariado para la reforestación. Solo en 2018, tras los grandes incendios del año anterior, los empleados de EDP plantaron 6 000 árboles en esas mismas zonas.